Rosario Traducciones sigue recorriendo el mundo con el fin de conocer las particularidades y características de los diferentes mercados mundiales. Este mes el destino seleccionado es Malasia, uno de los principales destinos de las exportaciones santafesinas. Al tratarse de un país industrializado y con abundantes recursos naturales (petróleo, gas natural, estaño, cobre, mineral de hierro, madera), es considerado como la segunda economía más desarrollada de la Asociación de Naciones Unidas del Sudeste Asiático (Asean). En esta nota compartimos algunos consejos a tener en cuenta para entablar relaciones comerciales con este país.
1) 1 rey, 9 sultanes
Los gobernantes tradicionales de etnia malaya, en su mayoría conocidos con el título de “sultán”, son nueve líderes de los 13 estados de Malasia, y constituyen uno de los sistemas monárquicos más grandes del mundo. Siete de las familias reales son monarquías hereditarias, y el sultanato de Kedah es una de las dinastías ininterrumpidas más antiguas del mundo, pues se remonta al siglo XII.
A partir de la independencia de Gran Bretaña en 1957, Malasia se ha constituido como una monarquía constitucional. Los nueve jefes de las familias reales participan en lo que se conoce como la Conferencia de Gobernantes y cada cinco años eligen a uno de ellos como rey de Malasia a través de una votación secreta.
2) Sociedad multiétnica
Malasia es una sociedad multiétnica en la que conviven aproximadamente un 56 % entre malayos y otros grupos indígenas, un 33 % de
chinos, y un 11 % de
indios, entre otros.
Por ser uno de los motores económicos del sudeste asiático, recibe una gran cantidad de inmigración de otros países asiáticos:
Indonesia, Myanmar, Sri Lanka, Filipinas, Bangladesh, etc.
Si bien la religión oficial es el islam, se define como sociedad multireligiosa donde hay templos y practicantes de casi todos los credos: budistas, taoístas, hindúes, cristianos y animistas.
3) Un idioma, varias lenguas
El malayo, conocido localmente como Bahasa Melayu, es una lengua austronesia hablada por los malayos, nativos de la península de Malaca, sur de Tailandia, Singapur y partes de Sumatra. Además de ser la lengua oficial de Malasia (hablada por la totalidad de sus habitantes, sean de origen
indio o
chino) es el idioma oficial de Brunei y una de las cuatro lenguas oficiales de vecino país Singapur.
Cabe señalar que gran parte de la población malaya habla un segundo o tercer idioma (tamil, cantonés o mandarín). Dado que el país fue colonia británica hasta 1957, mucha gente habla inglés de manera correcta.
4) País megadiverso y tropical
Malasia es uno de los diecisiete países considerados megadiversos. Estos países, que suponen solo un 10 % de la superficie de la Tierra, albergan en conjunto más del 70 % de la biodiversidad del planeta.
Su clima es tropical y por ello, mayormente caluroso. Si bien es cierto que existen zonas donde puede refrescar un poco, siempre será dentro de temperaturas altas. Desde mitad de noviembre hasta febrero el país se ve afectado por el viento monzón, mayormente en el sector de las islas y playas del este.
5) Tradiciones arraigadas
En Malasia, al igual que en otros países asiáticos, no está bien visto señalar con el dedo índice, al hacerlo se debe utilizar la mano entera abierta.
Tampoco es apropiado tocar la cabeza de otras personas, ya que esta se considera la parte más sagrada del cuerpo, ni resulta conveniente apuntar a las personas o lugares sagrados con los pies. Al sentarse, no se debe exponer las plantas de los pies hacia los demás. Y, al ingresar a un templo sagrado, las personas deben arrodillarse, dejando los pies hacia atrás o hacia un costado.
Al igual que la
India, se suelen utilizar las manos para comer, pero para este fin solo debe usarse la derecha, ya que la izquierda está reservada para ir al baño.
Por último, se recomienda evitar vestirse de amarillo, ya que es el color utilizado por los disidentes del gobierno.
Importante: Comercio exterior en tiempos de pandemia
El pasado 11 de marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó como pandemia la situación de COVID-19.
A la hora de establecer o retomar relaciones comerciales con clientes de este país, se recomienda informarse de la situación actual de su región, su situación personal como también las políticas sanitarias aplicadas. Una comunicación fluida y constante le permitirá estar al tanto y poder tomar mejores decisiones en esta delicada coyuntura mundial.